“¿No sería maravilloso que todos pudiéramos experimentar las emociones que provoca un gran cuadro?” se preguntó Olson, antiguo fotógrafo de ‘LIFE’ y fundador de ‘3D Photoworks‘, donde mediante un proceso de desarrollo que le tomó 7 años en diseñar imprime reconocidas obras en 3D para que una persona pueda “leer” la obra con sus manos.
Además incluyen unos sensores que aportan información en audios explicativos sobre el detalle o la obra en general.